jueves, 30 de octubre de 2008

Melómano

Desde muy chamaco me gustó la música. Cuando tenía 4 años mi mamá me compró un disco de 45 revoluciones con el hitazo del momento "Copacabana" de Barry Manilow, cuenta mi madre que a todos lados iba y venía con mi disco bajo el brazo, a mi me queda sólo un vago recuerdo, pero siempre me ha causado una enorme satisfacción escuchar música. Tiempo después escuchaba con mi hermano una y otra vez las canciones de los Beatles, quizá por eso me gustan tanto, me recuerdan cuando era niño.
Cuando entré en la adolescencia no deseaba nada más en el mundo que una batería, y mi madre me hizo realidad ese sueño cuando cumplí 18, claro que a partir de ese momento fui el azote de la familia, porque soportar el sonido de una batería no es cosa fácil, es un instrumento brutalmente escandaloso, más aún cuando quien lo toca no sabe hacerlo, pero ni pex, sólo así se aprende. Toqué la batería unos años, me junté con dos cuates de la prepa y ensayábamos todos los días en casa de mi tía, era un enorme gusto y placer juntarnos cada tarde a intentar montar una rola, vale gorro si tocas bien o mal siempre y cuando te apasione y te pases unas tardes inolvidables, así me pasaba a mi.
El buen Obed, quien fungía como guitarrista me enseñó algunos acordes en la guitarra y desde entonces le 'rasco a la chillona' y le pego algo al bajo; lo suficiente como para pasármela bien.
Todo esto viene muy a cuento porque hace algunos meses comencé a participar en el Podcast de mi hermano, muy recomendable por cierto, se llama PopCast Radio y todos los jueves puedes escuchar 50 minutos muy amenos, de buena música, recomendaciones, estrenos etc.
Mi participación en el podcast consiste en recomendar un álbum, pero hace un par de meses le propuse a mi hermano hacer un cover cada mes de alguna rola clásica, algo acústico, que no tuviera nada que ver con la versión original y que a los podescuchas les resulte interesante, le latió la idea y en agosto salió el primer cover.
No soy músico, so what!, pero le echo ganas, aprendo mucho y sobre todo lo disfruto muchísimo, además de que ya no tengo que cantar (porque eso sí que no es lo mío, canto peor que Juanito Farías), descubrí que C canta muy bien, así que ya no tengo que cantar.
Aquí les dejo el último cover que hice para el popcast. Que me perdonen los creadores, pero esta es mi versión de un clásico de Metallica...
Boomp3.com

jueves, 23 de octubre de 2008

Las mejores 100 fotos de portada

La revista Popular Photography destaca esta semana en su edición on-line un producto verdaderamente suculento para los que nos gusta la música y la fotografía: "100 Best Photo Album Covers". Vale la pena preparar un café, poner un poco de música y disfrutar de esta excelente selección, en la que por cierto, no sólo se trata de ver, sino de enterarse de algunos detalles interesantes de cada fotografía, no se hable más, dale click aquí

lunes, 20 de octubre de 2008

Para paladares exigentes

En días pasados REFORMA publicó un ranking de los mejores restaurantes de México, la metodología con la que hicieron el ranking me pareció sumamente confiable; entrevistas a más de 6 mil comensales en más de 100 restaurantes de la Ciudad de México, en fin, resulta que la neta del planeta en esta ciudad es el Pujol, un restaurante de cocina de vanguardia en Polanco.
Yo la verdad soy un neófito de la 'alta cocina', en general disfruto mucho de comer lo que yo mismo preparo y de vez en cuando ir a un buen lugar a cenar con una botella de vino, aunque debo reconocer que lo hago con menos frecuencia de lo que me gustaría.
Todo esto viene a cuento porque platicaba con el buen Chaval sobre estos restaurantes ultra-mamonsones, sobre todo los europeos; me comentó que actualmente el mejor restaurante en el mundo es un lugar en el noreste español llamado "El Bulli", este lugar considerado la Meca de la cocina de vanguardia y propiedad de Ferran Adrià, uno de los punteros en la escena culinaria internacional, ofrece un menú de degustación por 175 euros.
Leer el menú dibuja un signo de interrogación en la frente de quienes no frecuentamos estos lugares, chécalo:

Se empieza con unos platillos tan curiosos y dispares como las olivas esféricas, el muelle de aceite de oliva virgen, lazos de zanahoria con sorbete concentrado de mandarina y almendra o el marshmallow de piñones. Se continúa con oreo de oliva negra con crema doble, disco de mango, melón cru con hierbas y almendra tierna, caramelo de aceite de calabaza. Y seguimos con la ninfa de algodón, mozarella casera con albahaca, tempura de salicomia al azafrán con emulsión de ostra y ostra con emulsión de jamón y su perla. Finalmente, brioche al vapor, deshielo, lío de zanahoria, nudos esferificados de yogur con ficoide glaciale, alcaparras y «beurre noir», mejillones de roca calientes con picada deconstruida, crunchy de almendra tierna y tomatillo, nueces con crema de nueces, shabu-shabu de hígado de rape con linquat de sésamo, ventresca de caballa en escabeche de pollo, espardenyes con mentaiko y ruibarbo, sesos de cordero con erizo y algas. El menú degustación se finaliza con una leche merengada, liqüid de melocotón, cocción roja, morphings, etc.

lunes, 6 de octubre de 2008

La 'influencia' de Apple

Mientras el buen Chaval buscaba información sobre algunas series de TV mexicana, nos llamó la atención la página de internet de la serie Mujeres Asesinas, esta serie tan en boga hoy día.
Basta verla unos cuantos segundos para darse cuenta que dicha página de internet es una fiel reproducción del portal de Apple.

Como diseñador soy un asiduo fan de Apple y me parece que su influencia en el diseño contemporáneo es francamente monumental, pero de eso a calcar su portal es muy lamentable. OJO: no sé qué motivo a quienes diseñaron la página de Mujeres Asesinas a hacer esto, probablemente ni siquiera sea una decisión que tomaron ellos, en una de esas el cliente les pidió que fuera así, porque créanme, se dan casos en que el cliente quiere ‘esto’, ‘así’, ‘idéntico’, ‘no, no te pongas creativo’, ‘tal cuál me gusta’... etc. mientras el pobre y frustrado diseñador enfrenta una guerra ética entre su orgulloso espíritu creativo y la necesidad de pagar la renta... en fin, prefiero pensar que así fue...